Hace días tuve la suerte de conocer de primera mano a los integrantes del estudio belga Pinkeye. Shoe Class es uno de sus proyectos más directos.
Las baldosas del local hicieron que el equipo de diseñadores rememorara días de estudio y diversión. Poco después estaban rescatando mobiliario y artilugios escolares que iban camino del limbo y conseguían así crear un espacio con clase y de costes muy ajustados.
Un encargo de planteamientos convencionales y bajo presupuesto pasó a convertirse en una solución atípica y ecoeficiente. El promotor, escéptico al principio, vio como la tienda acaparaba la atención de clientes y curiosos.
Abran sus libretas y tomen nota: «Crear un proyecto económico es factible; que al mismo tiempo sea una solución atractiva, es para nota. Porque las buenas ideas no tienen precio.» 🙂
Diseño Pinkeye
Fotos Julien Lanoo
Shoe Class está en Sint-Katelijnevest 44, B-2000 Amberes, Bélgica.
Me encanta las lamparas , ese negro lacado es precioso , y las mini taquillas 🙂 Off the record: ¿Por cierto es mi imaginación o en una esquinita del blog hay una carita sonriente? ¡Qué tengas una semana genial!
Sí que hay una carita!!! Fue una de las cosas que me hizo elejir esta plantilla, eso y el color que recuerda al cartón.
Gracias por tu comentario y hasta más ver.
me encanta todo lo que haces
Gracia Helena, intento hacer la mejor selección posible. Pero el auténtico merito lo tienen los autores de los proyectos. Eso si que es clase. A ver si yo puedo diseñar algo como esto algún día.